¿Qué pasa con tu fe cuando las cosas no salen como esperabas?
Comencé a escribir esta entrada hace un año, y precisamente porque las cosas no salieron como esperaba, tuve que cambiarle el sentido. Ya es momento de hacer la continuación de algo que escribí hace un tiempo “Las pruebas te catapultan o te hunden, tu decides”.
El hierro es uno de los elementos más abundantes en la tierra, es un metal maleable, tenaz, de color gris plateado y magnético, es conocido por su resistencia, pero también por la posibilidad de ser moldeado cuando es sometido a un incremento de temperatura, casualmente su símbolo químico es FE.
Según la teoría, plasmada en el documental 'Titanic: la nueva evidencia' -basada en una investigación del periodista irlandés Senan Molony-, la causa que precipitó el hundimiento del Titanic fue un incendio en la zona de calderas. Esta hipótesis sostiene que el fuego afectó a uno de los almacenes de carbón del transatlántico y provocó el debilitamiento de su casco metálico, y al impactar el barco contra el iceberg este generó una grieta y por allí comenzó la inundación. (https://www.diariodemallorca.es/sociedad/2018/04/13/hundio-realmente-titanic-cuatro-teorias/1304003.html)
Todo el tratamiento de mi papá venía desarrollándose inexplicablemente bien, parecía que la promesa dada por Dios se estaba cumpliendo: “He aquí que yo les traeré sanidad y medicina; y los curaré, y les revelaré abundancia de paz y de verdad” (Jeremías 33:6) y esto alimentaba mi Fe, me imaginaba junto a él contándole al mundo como Dios había hecho su milagro de sanidad.
Pero en un abrir y cerrar de ojos todo cambió, ese diciembre que parecía pasaríamos celebrando en familia en paz y tranquilidad, se torno de un momento a otro en color gris, una complicación en la salud de papá hizo que tuviera que ser hospitalizado, fue en ese momento donde comenzó la batalla de mi Fe, Dios me recordó lo que me había dicho un año atrás, es más importante la Salvación que la sanidad, la sanidad viene por añadidura, pero es Dios en su soberanía quien decide cuándo darla y cuando no, vivimos es para buscar el reino de Dios por encima de todo, y todas las cosas nos serán añadidas (Mateo 6:33).
Después nuevamente de muchos exámenes, muchos especialistas y juntas médicas, tuvimos el diagnóstico: médicamente no había nada que hacer, y comenzó un tiempo muy difícil, donde tuve que darme cuenta que mi Fe se había comenzado a debilitar, que mi fe había estado puesta en una expectativa de un milagro de sanidad y no en el Dios que hace milagros, y esta expectativa fue lo que poco a poco, como un incendio fue debilitando el hierro de mi Fe, y sin darme cuenta fue generando una grieta entre Dios y yo.
PERO, ¿QUÉ ES LA FE?
Ahora bien, la fe es la garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve (Hebreos 11:1), pero me costó entender que esa garantía de lo que se espera, no es mi expectativa, sino que debía ser esperar la voluntad de Dios, la cual es buena, agradable y perfecta, con la certeza de que Dios obra para bien en ella, así el resultado no fuera el que yo esperaba.
Entendí porque las personas nos alejamos de Dios cuando las cosas no salen como esperábamos, porque en lugar de fortalecer nuestra fe, la debilitamos con nuestras expectativas y deseos, pero Dios nos dice: a menos que ustedes tengan una Fe firme no puedo hacer que permanezcan firmes (Isaías 7:9), y sin fe no podemos agradar a Dios (Hebreos 11:6)
Hoy entiendo que la muerte de mi papá fue la voluntad de Dios, que Dios siempre sana, y le dio a él la mayor sanidad que Dios nos puede dar: el llevarnos a su presencia, hoy se que Dios obró para bien y se glorifico en la vida de mi papá sanando su corazón dándonos la paz de saber que está en su presencia.
Realmente Dios cumplió su promesa, le dio una sanidad perfecta a mi papá y a nosotros como familia nos dio una abundante paz que sobrepasa todo entendimiento, al enseñarnos a vivir el día a día y el orar en todo momento.
"La gente buena se muere; muchas veces, los justos mueren antes de que llegue su hora. Pero a nadie parece importarle el porqué, tampoco se lo preguntan a sí mismos. Parece que nadie entiende que Dios los está protegiendo del mal que vendrá. Pues los que andan por el camino de la justicia descansarán en paz cuando mueran." (Isaías 57:1-2)
¿QUÉ PODEMOS HACER?
El hierro es usado en estructuras y si este no está lo suficientemente firme se puede romper, La fe es la estructura de tu vida cristiana, pero si la fe no está lo suficientemente firme, si fue mezclada con expectativas se puede romper.
Por eso, es importante que tengamos una Fe de hierro que no sea maleable al calor de nuestras circunstancias, tenemos que identificar el calor que poco a poco va debilitando el hierro de nuestra fe, porque cuando llegue un iceberg a nuestra vida puede llegar a hundirnos, así como el hierro es un elemento abundante en la tierra, la palabra de Dios debe ser abundante en nuestras vidas, ya que la fe, viene por el oír y el oír por la palabra de Dios (Romanos 10:17), así que debemos tener cuidado quien tiene nuestro oído, si realmente estamos escuchando a Dios para fortalecer nuestra fe, o si estamos escuchando a nuestras expectativas y deseos.
Y aunque aun sigo en esta batalla de la Fe, y hay cosas que me cuesta creer, sigo alimentando mi fe, recordando lo que Dios ha hecho en mi vida y creyendo en que sus planes son de bienestar para darme un futuro y una esperanza...
¿Que tan firme está tu Fe?
Vivimos por fe, no por vista. (2 Corintios 5:7)
